Sin vuelta atrás

Y cuando me di cuenta ya no se podía volver atrás lo hecho, hecho estaba y no había nada que hacer y entonces me di cuenta de que me había arriesgado demasiado y que ahora ya era tarde para rectificar y comencé a pensar que me lo habían avisado y que yo no quise hacer caso, sí, me he equivocado y si, fui tonta al no hacer caso de nadie, pero ya es tarde, solo queda asumir las consecuencias y las asumiré, no tengo miedo.